El Gobierno dictó tres resoluciones para controlar a los productores. Un nuevo avance que incluye chips a las vacas.
Fue uno de los temas más recurrentes durante este jueves en el marco del primer día de La Rural de Palermo que contó con la presencia de Mauricio Macri, Luis Miguel Etchevehere, Alfredo de Angeli, Miguel del Sel y Gerónimo “Momo” Venegas, entre otros.
Es que, según pudo saber La Política Online, dirigentes rurales, políticos de la oposición, sindicalistas y productores no pudieron evitar conversar sobre la necesidad de eliminar una serie de polémicas medidas que fue publicando el Gobierno nacional durante los últimos días.
En este sentido, primero fue el proyecto para registrar todas operaciones de compra/venta de granos en el mercado local (aunque en este caso, tras el rechazo casi unánime del sector, se logró eliminar la intervención de la Comisión Nacional de Valores).
Luego apareció la resolución 3649/14 –publicada el lunes en el Boletín Oficial– que determina que a partir del 1 de enero todas las vacas del país deberán tener dispositivos de trazabilidad individual certificados por la AFIP (una especie de chips insertados en los animales).
Y en tercer lugar, y para sorpresa de muchos, este jueves se publicó la norma 189/14 que establece que a partir de agosto próximo las empresas lácteas deberán comenzar a informar a los tamberos los precios y plazos de pago de la leche recibida.
Se trata, según creen en el agro, de tres medidas que buscan -con el pretexto oficial de beneficiar a los productores- perseguir con un control excesivo al sector como castigo por su oposición a las políticas oficiales (es decir, una especie de “Gran Hermano K” en el campo).
Lo cierto es que las medidas generaron un alto grado de descontento entre los dirigentes rurales: “Suena raro ponerle un chip a cada vaca y más raro aún es que lo haga la AFIP”, apuntó el presidente de Federación Agraria (FAA), Eduardo Buzzi, en diálogo con LPO.
En la misma línea, Etchevehere también fue terminante: “Quieren sacar un chip que va a significar un negocio de u$s 500 millones, cuando en realidad lo que necesitamos es un plan integral para recuperar la ganadería”, disparó en declaraciones a la prensa.
Así las cosas, lo concreto es que este jueves algunos aprovecharon para comenzar a analizar la posibilidad de eliminar las tres resoluciones antes mencionadas teniendo en cuenta que en el campo la gran mayoría apuesta al fin del kirchnerismo en el poder a partir de 2015.
“Tenemos que aprovechar estos días de la muestra para comprometer a los políticos a desarticular todas estas normas y restricciones que impusieron estos años para entorpecer nuestro trabajo”, comentaba por lo bajo un alto dirigente agropecuario en Palermo.
Sucede que la visión general del campo es que estas medidas de control por parte de la AFIP forman parte de un nuevo avance de Ricardo Echegaray sobre el sector en el marco del plan venganza que viene instrumentando el kirchnerismo desde 2008 a la fecha.
Justamente en la inauguración de La Rural, Macri se refirió a la necesidad de quitarle las trabas al campo. “Veo al campo limitado en su potencialidad; hay que dejar de confrontar con el sector como lo hizo este Gobierno durante los últimos diez años”, dijo el jefe de Gobierno porteño.
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