Las caras visibles de los principales partidos políticos, desde Sergio Massa y Mauricio Macri hasta Hermes Binner, Ernesto Sanz, Margarita Stolbizer y Fernando "Pino" Solanas, entre otros, respondieron a una convocatoria de la Iglesiay firmaron ayer un compromiso para establecer políticas públicas para prevenir el consumo de drogas y combatir el narcotráfico.
Sólo faltó Daniel Scioli, invitado en su carácter de presidente del PJ, que participó de la redacción del documento y envió su adhesión al titular de la Comisión de Pastoral Social, monseñor Jorge Lozano. El texto surgió a la luz de las reuniones que Lozano mantuvo con distintos referentes políticos, luego del duro documento en el que la Iglesia denunció en noviembre el avance del narcotráfico y la complicidad del Estado.
El vitraux con la imagen de San Carlos Borromeo, en el Episcopado, sirvió de marco para que los políticos -muchos de ellos con aspiraciones presidenciales- se dispusieran a "enfrentar esta emergencia social" del narcotráfico y "desalentar el consumo de drogas".
Se comprometieron a impulsar la revisión de las leyes sobre lavado de dinero, el decomiso e incautación de bienes ligados al narcotráfico, crear una Agencia Federal que enfrente el delito complejo y el control efectivo del espacio aéreo, ríos, mares y fronteras terrestres, y reglamentar un programa educativo sobre adicciones y consumo de drogas, entre otros puntos.
Suscribieron también el documento Víctor De Gennaro (Unidad Popular), Humberto Tumini (Libres del Sur) y Pablo Javkin (Coalición Cívica-ARI). Fuera de la mesa se encontraban Alfonso Prat-Gay, Patricia Bullrich, Mario Cafiero y Jesús Rodríguez, entre otros. Envió su adhesión el gobernador José Manuel de la Sota. La ausencia de Scioli dio pie a especulaciones que ponían en duda el compromiso del Gobierno con la ofensiva contra el narcotráfico, El obispo Lozano despejó las dudas al sostener que el propio Scioli hizo aportes al documento y que no envió un reemplazante porque la convocatoria se limitó a los presidentes de los distintos partidos.
Mientras Macri pronosticó que "en los tiempos que vienen serán más habituales estas instancias de diálogo", Massa llamó a la "unidad de las fuerzas federales y fiscales y a la inteligencia criminal para apuntar al dinero del narcotráfico".
Sanz pidió "no legislar más leyes de blanqueos" y prometió derogar la norma que aprobó el gobierno kirchnerista. Stolbizer denunció que el país ya es productor de estupefacientes y Binner lanzó la advertencia más preocupante: "El narcotráfico comienza como un lugar de paso, más tarde de consumo y luego de producción. Coopta a las fuerzas federales y después viene una etapa a la que todavía nuestro país no ha llegado: la financiación de los partidos políticos". Para evitarlo, pidió fortalecer el diálogo y ser "claros, objetivos y coherentes en esta lucha".
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