Todos son hombres de negocios vinculados con el poder. Algunos se acomodaron al cambio económico de Néstor a Cristina. Así como unos hicieron crecer su imperio, otros que quedaron “presos” del modelo o de sus palabras. Los “in”, los “out” y los que lograron “surfear la ola” .
Desde sus comienzos el kirchnerismo ha impulsado a determinados empresarios, ha mantenido una relación tirante con otros y ha alejado a varios que, en un principio, eran muy allegados a la Casa Rosada.
Varios analistas han denominado a este fenómeno como “capitalismo de amigos”. Sin embargo, en esa “amistad”, resulta curioso observar cómo la lista se ha ido modificando, pese a que el poder haya pasado de Néstor a Cristina Kirchner y siendo que ambos, a primera vista, impulsaron la misma visión del “modelo” económico.
En los “cambios de figuritas” aparecen ejecutivos cuyas corporaciones han crecido de manera exponencial. Otros que han “surfeado la ola” y aquellos que se han mantenido en las antípodas de la visión K.
Mindlin, de “héroe” a imputado
El caso de Marcelo Mindlin -al igual que lo sucedido con Enrique Eskenazi- es fiel reflejo de cómo un empresario puede pasar “de héroe a villano”, a raíz de un sector caído en desgracia como el energético.
El caso de Marcelo Mindlin -al igual que lo sucedido con Enrique Eskenazi- es fiel reflejo de cómo un empresario puede pasar “de héroe a villano”, a raíz de un sector caído en desgracia como el energético.
En los comienzos de la gestión de Néstor (y en medio de la avanzada oficialista sobre los capitales extranjeros que participaban en las compañías de servicios públicos) Mindlin se hizo del apoyo suficiente para comprar Edenor a una firma francesa, a través de Pampa Holding.
En 2004, cuando dio ese “gran paso”, todos eran elogios por parte de la administración K. Pero Mindlin quedópreso del congelamiento de tarifas y de una política errática en materia energética.
Así, Edenor fue puesta contra las cuerdas y las diferencias del empresario con el Gobierno se hicieron más visibles, ya en tiempos de Cristina en el Ejecutivo.
El quiebre total de relaciones se dio cuando afirmó que la compañía no tenía pensado avanzar en grandes inversiones hasta tanto el Ejecutivo no modifique su política tarifaria.
La reacción oficial no tardó en llegar: ahora quedó imputado en una causa por supuesto lavado de dinero que inició Procelac, un organismo del Estado que funciona bajo la órbita de la UIF.
Los Eskenazi, de “héroes” a “malos” de la película
Durante el primer tramo de la década k, los dueños del Grupo Petersen pasaron de ser banqueros y constructores de segundo orden a dueños de un 25% de YPF.
Durante el primer tramo de la década k, los dueños del Grupo Petersen pasaron de ser banqueros y constructores de segundo orden a dueños de un 25% de YPF.
La operación se realizó prácticamente sin que aporten dinero. El 2008 fue un año de palmadas en la espalda y de reverencias hacia el “grupo argentino” que participaba activamente del negocio petrolero.
Pero las complicaciones energéticas en las que fue entrando el país los fue hundiendo frente a los ojos de Cristina, que hasta habría recordado que los Tribunales no son muy hospitalarios en épocas de rencillas con el poder.
De nada sirvió a los Eskenazi recordarle que una de las pocas veces que habían pasado por la Justicia fue por la causa iniciada para esclarecer un plazo fijo que se constituyó en el Banco de Santa Cruz, propiedad de la familia, en el que se depositaron los fondos de las regalías petroleras en tiempos en que su marido era gobernador.
No hubo más diálogo. Pasaron casi dos años. Hoy, el Grupo Eskenazi está en silencio y tildado como uno de los responsables de la pérdida de autoabastecimiento energético.
Concentra sus negocios en el segmento bancario con bancos en Entre Ríos, Santa Cruz, Santa Fe y San Juan.
Alfredo Coto, el “avestruz”
Alfredo Coto, que abrió su primer supermercado en Mar de Ajó y hoy dirige más de 120 puntos de venta, tuvo que “esconder la cabeza” y bajar el perfil, luego de los cruces con el kirchnerismo.
Alfredo Coto, que abrió su primer supermercado en Mar de Ajó y hoy dirige más de 120 puntos de venta, tuvo que “esconder la cabeza” y bajar el perfil, luego de los cruces con el kirchnerismo.
En el arranque de la gestión de Néstor mantuvo un buen diálogo con el primer mandatario, tuvo alta exposición mediática y hasta fue orador del Coloquio de Idea.
Pero todo cambió a partir de ese “fatídico” 2005, cuando expuso en público el problema de la inflación, lo que enfureció al entonces Presidente.
“Señor Coto, yo lo conozco muy bien a usted. Yo sé cómo trabaja con el bolsillo de los argentinos. No tengo dudas de que usted se carteliza”, manifestó el entonces jefe de Estado.
El directivo admitió que no era fácil la tarea de los empresarios porque, a veces, “recibe algunos golpes, como me pasa a mí ahora”, en alusión a las críticas recibidas.
La ruptura con el kirchnerismo no tuvo vuelta atrás. “Enterró la cabeza”, bajó su perfil y retiró los avisos en medios gráficos para evitar un choque con Guillermo Moreno.
Jorge Brito, de amigo K a enemigo de Moreno
El titular del Banco Macro tuvo su momento de mayor cercanía con el kirchnerismo también en tiempos de Néstor. Pero claramente su relación con “ella” es distinta a la que mantenía con “él”.
El titular del Banco Macro tuvo su momento de mayor cercanía con el kirchnerismo también en tiempos de Néstor. Pero claramente su relación con “ella” es distinta a la que mantenía con “él”.
El directivo no tuvo una buena relación con Guillermo Moreno, que lo tilda -para empresarios y analistas erróneamente- de ser uno de los responsables de haber fugado dólares y de generar una minicorrida bancaria.
Fue convocado en un reciente encuentro que propuso Cristina para reflotar el diálogo tras la derrota del oficialismo en las PASO, aunque su cercanía con Sergio Massa -al igual que Eurnekian- no lo deja en buena posición frente a los ojos de la mandataria.
Cristóbal López y su “década ganada”
Empezó su derrotero en tiempos de Néstor Kirchner, pero su despegue continuó con Cristina.
Empezó su derrotero en tiempos de Néstor Kirchner, pero su despegue continuó con Cristina.
La lista de empresas que posee fue creciendo, entre las que se destaca Casino Club.
También dirige los destinos del gigantesco Grupo Indalo y marca presencia en sectores de los más disímiles: desde alimentos y petróleo, hasta construcción y combustibles, pasando por medios de comunicación, autopistas y transporte.
En el sector de alimentos participa con Aceites Indalo, Ganadera Santa Elena y La Salamandra.
Oil Competición y Oil Combustibles componen Indalo Combustibles. Su incursión en la actividad cobró protagonismo luego de la adquisición de unas 365 estaciones de servicio antes en manos de EG3 y Petrobras, además de haber sumado a sus activos a la Refinería San Lorenzo.
En servicios y producción petrolera participa en Oil M&S, Petrolera Cerro Negro, Serma, Feader y Tsuyo. En infraestructura está presente con Oil Construcciones.
Con otra de sus empresas, habría comprado parte del paquete accionario de Autopistas al Sur, la firma que explota la concesión de la traza que une la Capital Federal con el aeropuerto de Ezeiza y con la ciudad de Cañuelas.
En medios de comunicación, poseía el Diario Patagónico. Luego adquirió el portal minutouno.com, el canal C5N, Radio 10 y cuatro FM (Mega, Vale, Pop y TKM).
También avanzó con el 70% de la productora de Tinelli, Ideas del Sur.
Tinelli, mucho más que conductor de TV
La relación de Marcelo Tinelli con el kirchnerismo comenzó durante la gestión de Néstor, si bien su vínculo con el mundo K se fue afianzando durante el mandato de Cristina.
La relación de Marcelo Tinelli con el kirchnerismo comenzó durante la gestión de Néstor, si bien su vínculo con el mundo K se fue afianzando durante el mandato de Cristina.
Hubo intentos del Gobierno de “mudar” el programa televisivo del conductor del Grupo Clarín a Telefé, lo que hubiese significado un duro golpe para Canal 13.
Este año, Tinelli tenía pensado hacer su show de TV con la participación de imitadores políticos (que le había dado rédito en 2009) pero esta idea trajo preocupación en la esfera oficial por tratarse de un año electoral.
Por lo pronto, no está presente en la pantalla, logró que Cristóbal López ayude a financiar sueldos y costos de su productora y el showman volverá a la TV en 2014, tras un 2013 sabático.
Los Bulgheroni, “adaptables” a los tiempos
Con la llegada del kirchnerismo, los hermanos Carlos y Alejandro Bulgheroni fueron adaptándose al nuevo contexto político.
Con la llegada del kirchnerismo, los hermanos Carlos y Alejandro Bulgheroni fueron adaptándose al nuevo contexto político.
Con Cristina en la presidencia, el grupo dio el gran paso cuando Pan American Energy obtuvo la explotación de las reservas petroleras de la provincia de Santa Cruz por el lapso de 40 años.
Ahora, los Bulgheroni se han sumado a los interesados en extraer petróleo y gas en Vaca Muerta, mediante una inversión de unos u$s500 millones vía bonos BAADE.
Lázaro Baéz, el constructor caído en desgracia
Su primer trabajo fue como cadete en el Banco Nación de la provincia, en 1980. Con los años pasó a ser gerente adscripto del Banco de Santa Cruz, cuando Néstor Kirchner asumía la gobernación.
Su primer trabajo fue como cadete en el Banco Nación de la provincia, en 1980. Con los años pasó a ser gerente adscripto del Banco de Santa Cruz, cuando Néstor Kirchner asumía la gobernación.
En 1990 le ofreció una lista con los clientes más poderosos del banco con lo que se ganó su confianza.
A lo largo de la década había sumado el hotel Las Dunas en El Calafate y la representación de Firestone para toda la Patagonia.
Poseedor de tres constructoras, Gotti, Badial y Austral -gran beneficiaria de la obra pública santacruceña-, tras el escándalo en torno a sus negocios que estalló durante este 2013 aseguran que Báez ahora está focalizado en Austral.
Paolo Rocca, el que “va y viene”
En julio de 2013, el viceministro de Economía, Axel Kicilloff, se sentó junto al presidente de Techint, el empresario Paolo Rocca, durante la inauguración de una nueva obra en la planta de Ternium Siderar.
En julio de 2013, el viceministro de Economía, Axel Kicilloff, se sentó junto al presidente de Techint, el empresario Paolo Rocca, durante la inauguración de una nueva obra en la planta de Ternium Siderar.
Esta imagen llamó la atención, dado que meses atrás el joven funcionario K había señalado que “habría que fundir a Rocca, pero no lo vamos a hacer”.
Aquella amenaza sucedió luego de que el empresario afirmara que “a partir de 2008 el Gobierno perdió el rumbo y no se sabe para dónde va”.
Hoy día, esa pelea parece haber quedado atrás y Rocca, que maneja los hilos de Tenaris Siderca, Tecpetrol, Techint ingeniería y construcciones, mantiene una convivencia algo más armoniosa con el Ejecutivo.
Eurnekian, viejo conocedor del juego político
Eduardo Eurnekian, hombre de reconocida visión y habilidad empresaria, ganó mayor protagonismo a lo largo de la década con la expansión de Aeropuertos Argentina 2000.
Eduardo Eurnekian, hombre de reconocida visión y habilidad empresaria, ganó mayor protagonismo a lo largo de la década con la expansión de Aeropuertos Argentina 2000.
Primero con Néstor, luego con Cristina, este ejecutivo supo adaptarse a los cambios y ha acompañado las circunstancias para ir haciendo crecer su imperio.
En el ámbito del desarrollo agropecuario creó la división Unitec Agro, que posee la mayor extensión de tierras irrigadas artificialmente en Argentina, y gerencia seis cabañas distribuidas en Chaco y Formosa.
Con otra de las compañías, Unitec Bio, ingresó en el negocio de los biocombustibles y construyó dos plantas de biodiesel. En la industria vitivinícola se asoció con una familia que preside Bodega del Fin del Mundo.
En el sector energético, posee concesiones para la exploración y el desarrollo de petróleo y gas en el sur argentino y anunció la inversión de u$s500 millones para asociarse con YPF.
En el sector tecnológico -a través de su firma Unitec Blue- ya efectuó un primer desembolso para la fabricación de chips. La inversión total será de algo más de u$s1.000 millones y su idea apunta a venderle a toda la región.
Además, en los últimos meses fue mencionado como uno de los interesados en quedarse con el negocio local de la operadora Nextel.
Aranguren, el “anti K” de siempre
De Néstor Kirchner a esta parte, el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, le impuso a Shell más de 80 multas y promovió más de 50 causas penales contra Juan José Aranguren, responsable de la filial local de la multinacional.
De Néstor Kirchner a esta parte, el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, le impuso a Shell más de 80 multas y promovió más de 50 causas penales contra Juan José Aranguren, responsable de la filial local de la multinacional.
La petrolera recibió casi en soledad el boicot que un colérico Néstor Kirchner le armó siendo presidente. Fiel a su estilo, recientemente declaró que “ese boicot finalmente benefició a la compañía”, ya que las exportaciones de los excedentes le reportó mayores ganancias.
Días atras se refirió a Guillermo Moreno: “Una persona que ha demostrado fallar cada vez que ha tratado de intervenir la economía lo va a hacer con más prepotencia porque se lo dejamos hacer”.
A diferencia de Alfredo Coto, por ejemplo, que decidió bajar su perfil, Aranguren (respaldado por Shell) siguió firmeen su postura anti K.
El directivo no ahorra críticas hacia la Presidenta por el problema inflacionario y por la equivocada política energética que ha llevado el kirchnerismo en la década.
Cristiano Rattazzi, el “inimputable”
El titular de Fiat Argentina es uno de los que, cada tanto, no muestra reparos en enfrentar al Gobierno condeclaraciones que pocos se animan a hacer en los medios.
El titular de Fiat Argentina es uno de los que, cada tanto, no muestra reparos en enfrentar al Gobierno condeclaraciones que pocos se animan a hacer en los medios.
En épocas de Néstor Kirchner, no dudó en enumerar los problemas del país y del sector automotriz, además de criticar la alta dependencia de Brasil y la pérdida aguda de competitividad.
En el reciente Coloquio de IDEA disparó frases como que “la inflación es como una droga“, que “el relato no durapara siempre” y que “a mediano plazo vamos a tener un país en serio“.
Para los propios empresarios, Rattazzi “es inimputable”. Dice lo que piensa y cuando quiere, aunque esto le cueste algún llamado a la moderación por parte de los propias cámaras sectoriales.
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